“El ciclismo no puede vivir solo de la pasión y el sacrificio; necesita un modelo sostenible, visible y socialmente útil”, afirmó Nino Oliver, presidente de la Fundación Marcelino Oliver, durante un encuentro celebrado esta semana con directivos, marcas y entidades deportivas.
Oliver lanzó un mensaje claro al sector: ha llegado el momento de modernizar la estructura del ciclismo español y orientarla hacia un modelo más profesional y cercano a la sociedad.
“Hoy no basta con ganar carreras. Los equipos deben construir marca, generar valor, comunicar lo que hacen y crear comunidad. Solo así atraerán patrocinadores y asegurarán su continuidad”, subrayó.
Un nuevo enfoque para los equipos ciclistas
Durante su intervención, el presidente de la Fundación presentó las líneas maestras del modelo que están impulsando desde el área de desarrollo estratégico. Entre ellas, destacó la profesionalización de la gestión, la mayor visibilidad mediática, el compromiso social y el apoyo al ciclismo base y femenino.
“Si no se ve, no existe. El ciclismo debe volver a estar presente en los medios, en las redes y en la calle. El público tiene que sentir que este deporte forma parte de su vida cotidiana”, apuntó.
La Fundación apuesta, además, por un ciclismo que sirva como vehículo de solidaridad, educación y sostenibilidad, fomentando estructuras estables que impulsen el crecimiento del talento joven y femenino.
Del patrocinio clásico a la activación de marca
Oliver insistió también en la necesidad de renovar el modelo de patrocinio deportivo.
“El patrocinio tradicional se ha quedado obsoleto. Ya no se trata solo de poner un logo, sino de activar una marca, de conectar con valores, audiencias y experiencias reales”, explicó.
Según señaló, las marcas deben centrarse en ofrecer experiencias auténticas y emocionales que generen vínculos duraderos con el público. “Vivimos en una época de sobreinformación. Las marcas ya no pueden comprar atención, tienen que ganársela”, añadió.
El contenido como motor de conexión
Para Oliver, el contenido se ha convertido en una herramienta esencial para conectar equipos, marcas y aficionados.
“Un buen contenido amplifica el impacto del patrocinio, prolonga su visibilidad y construye marca a largo plazo. Ya no basta con estar, hay que contar algo que importe”, apuntó.
La Fundación propone un modelo de activación sustentado en cuatro pilares conversación, alcance, aspiración y legitimación, con el objetivo de acercar a los aficionados a las marcas de manera natural y atractiva.
Invertir con sentido
En materia de inversión, la Fundación recomienda una redistribución más equilibrada de los recursos: un 40% destinado a la adquisición de derechos y un 60% a medios, contenidos y experiencias.
“Las compañías deben entender que invertir en activación no es un gasto, sino una apuesta por la conexión emocional con sus comunidades. El fan es el centro de todo y debe sentirse parte de la historia”, recalcó Oliver.
Un ciclismo con propósito
Desde su creación, la Fundación Marcelino Oliver trabaja en áreas como la formación, la seguridad vial, la inclusión social y el apoyo a deportistas, con la meta de impulsar un ciclismo más humano y transformador.
Oliver cerró su intervención con un mensaje inspirador:
“Necesitamos un ciclismo que inspire, que emocione y que aporte valor real a la sociedad. Solo con visión, unión y estrategia conseguiremos que España vuelva a ser una referencia mundial en este deporte.”